Es notorio observar que el tiempo se acelera cada vez más y más adaptándose al incremento del pulso de la Tierra y entrar en resonancia con ella. Hay cambios que se acercan cuando estemos en el momento crítico de la entrada en el umbral del cambio dimensional. Todo ser vivo recibirá una nueva energía transformadora disolviendo la energía anterior dando paso a una nueva configuración en todo su esplendor. Los nuevos patrones se reorganizan en un orden más complejo dando lugar a organismos más perfectos afinados en un tono a las nuevas frecuencias de luz y que resuenan en todo el universo.